Son muchos los beneficios que el Mindfulness proporciona a los niños: Mejora el aprendizaje, la atención, la creatividad y el rendimiento académico. Pueden concentrarse mejor e ignorar las distracciones. Les ayuda a regular sus emociones, a encontrar la tranquilidad y el equilibrio cuando se sienten enfadados, angustiados, molestos…y a sentirse más seguros. Aumenta la introspección, ven más claramente lo que sucede en su interior, en su exterior, en los demás y en su entorno. Desarrollan la compasión y la amabilidad hacia si mismos y hacia los demás. Mejora las habilidades prosociales como la paciencia, la empatía, la alegría por el bienestar de los demás o la ecuanimidad. Por ello, este curso, hemos comenzado a practicarlo en clase. Algunas veces, nos cuesta concentrarnos, pero poco a poco lo iremos consiguiendo.